“Hasta que no vea el proyecto de ley, no me voy a quedar tranquilo. Hay mucha gente que me dice que yo tengo que ponerme al frente de esta defensa, y lo estoy haciendo”, afirmó Uñac.
“Si se comete ese error estaríamos poniendo en peligro 30.000 fuentes de trabajo solo en San Juan. Este nuevo gravamen aniquilaría directamente a los productores vitivinícolas”, agregó.

Después que los gobiernos provinciales de San Juan y Mendoza, como los empresarios del sector vitivinícola, pusieran el grito en el cielo por el impacto negativo que tendría la nueva alícuota, ayer trascendió que el Gobierno nacional analiza dar marcha atrás.

El impuesto de la polémica
Los cambios impositivos planteados contemplan una alícuota de hasta el 29% en bebidas blancas (hasta ahora ese porcentaje es del 20%), un gravamen del 17% en cervezas (hoy es el 8%), vinos y sidras 10% (hoy no alcanzados) y gaseosas y jugos con azúcar agregada el 17% (hoy pagan entre el 4% y el 8%).
Diario de Cuyo