Luego de quedar detenida por unas horas, en el marco de la investigación que se lleva adelante para determinar si armó o no un vuelo sanitario a espaldas del gobierno, y así violar las disposiciones locales, la médica infectóloga del Hospital Marcial Quiroga, Rosa Contreras, dio a conocer su versión de los hechos. En la tranquilidad de su casa aseguró que no influyó en ninguna medida para trasladar al tercer caso positivo de coronavirus desde Buenos Aires.
«No tengo ningún contacto con Porras porque no pido ni autorizo vuelos sanitarios».
Indicó que no conoce a Carlos Javier Porras, el encargado de los vuelos sanitarios, y que sólo se comunicó con el funcionario para hacerle llegar un documento, a pedido de su amiga médica, de quien se reserva su identidad de acuerdo a los protocolos internacionales sobre pacientes con coronavirus, a pesar de que su abogado indicó abiertamente el nombre de la profesional.
– Los audios que se viralizaron ¿son suyos?
– Si son míos y se refieren al tema de conseguir los resultados que necesitaba la doctora para el traslado de su hermano. Yo conozco a la médica desde hace años, tenemos una amistad.
– ¿Qué le pide que haga?
– Cuando se enferma su hermano, ella se comunica con varios colegas, entre ellos yo. Lo hace para tener noticias de él. Da la casualidad que conozco a la infectóloga que trabajaba en el hospital donde estaba internado. Con lo cual, me pude contactar y saber su estado de salud.
– ¿Es común este tipo de relaciones para pedir asistencia a otro colega por cercanía de contacto?
– Es común hasta con otros pacientes.
– ¿Cómo surge lo del traslado?
– Mi amiga me llama y me dice que ya tenía el vuelo de su hermano autorizado y que, como requerimiento, necesitaba los resultados por escrito de Covid negativos. Ella me indicó que tenía un resultado y la historia clínica. Le faltaba el segundo estudio. Por lo cual, me pidió si yo podía hablar con la infectóloga del hospital, porque necesitaba ese otro resultado. Eso es lo que hice. Hablé con mi colega, quien me confirma que no son dos, sino tres los test negativos. Eso es lo que yo le transmito al médico encargado del vuelo y ahí termina mi acción.
– ¿Es común que usted tenga contacto con Porras por un vuelo?
– Yo no tengo idea cómo se tramita un vuelo, a quién hay que pedirlo, cómo pedirlo y cómo se autoriza.
– ¿Y cómo llega usted a Porras?
– Mi amiga es quién me da el contacto de Porras para que le pase el resultado. Lo hago e incluso le digo que si quiere hablar con la infectóloga de Buenos Aires para que le pase el resultado que necesitaba.
– ¿Es normal que usted, como médica infectóloga, se comunique con el encargado de los vuelos sanitarios?
– No, sólo facilité un trámite para un vuelo que ya estaba autorizado, un documento que faltaba adosar a la historia clínica.
– En uno de los audios dice que lo va a intentar convencer a Porras, ¿por qué?
– Lo que yo le digo de convencerlo es que si le sirven, y eran suficientes, los Whatsapp que me había enviado la infectóloga de Buenos Aires, donde decía que los tres test eran negativos o si necesitaba el papel escrito. Porque todavía no estaban subidos al sistema que habilita los vuelos sanitarios. Incluso, le pasé el teléfono de la infectóloga para que él se comunique con ella y no fuera yo la intermediaria.
– En otro pasaje de los audios dan a entender que usted, como médica, estarían haciendo un procedimiento para tratar de que el paciente no haga la cuarentena obligatoria cuando ingresa a la provincia.
– No, está mal interpretado. El paciente viene a hacer la cuarentena sí o sí por venir de una provincia con circulación (del virus). Debe alojarse en un hotel o en su casa para que no esté en contacto con otras personas. Pero el aislamiento nosotros le llamamos cuando está con los elementos de protección, cuando sabes que es sospechoso o positivo. En Buenos Aires, él estaba sin aislamiento porque tenía tres test negativos, por lo que en San Juan podrían haber seguido así, pero sí debe cumplir la cuarentena. Son dos cosas distintas. El aislamiento es cuando el paciente hace fiebre y hay que atenderlo en un hospital, por ejemplo, en el área de Covid.
– Si venía de estar en terapia intensiva en Buenos Aires, ¿no correspondía que llegue a aislamiento?
– Venía a cuarentena, eso sí. Apenas llega, es donde hace fiebre y eso cambia la situación. Ahí es cuando pasa a estar en aislamiento. Eso se hace en el Hospital Rawson. En ningún momento se quiso evitar nada, ni de cuarentena, ni de aislamiento.
– ¿Usted recibió algún llamado de otra persona para facilitar el vuelo, o de alguna autoridad suya?
– No.
– ¿Entonces por qué cree que se produjo esta detención suya y el secuestro de su teléfono?
– Los audios se han mal interpretado y se han generado confusiones. Con tres hisopados negativos, no hubo ninguna contraindicación para traerlo. El vuelo ya estaba autorizado. Lo único que hice fue facilitar documentación de un paciente, comunicarme con la doctora de Buenos Aires para poder pedir ese papel que faltaba. Así como también me comuniqué después cuando el caso dio positivo acá, para que ella hiciera la investigación epidemiológica en el lugar donde estaba internada esta persona.
– ¿Cree que la ministra de Salud, Alejandra Venerando, estaba al tanto del vuelo?
– No lo sé.
– ¿Habló con Venerando después de este caso?
– No.
– ¿Con alguna otra autoridad de Salud Pública?
– No.
– ¿Sabe si el Gobernador estaba al tanto del vuelo sanitario?
– Creo que el Gobernador no estaba al tanto. No creo que sea algo que maneje él. No lo sé. Lo único que puedo decir es que el vuelo fue bien realizado.
– Entonces, usted dice que el vuelo se produjo con todas las medidas y previsiones sanitarias.
– Si. Con todas.
– ¿Incluso con la cantidad de pacientes que se trasladaron?
– Eso no lo manejo yo. No tengo ni idea a quién traen. Yo lo único que sabía era que traían a este paciente.
– Luego de que se produjo el vuelo, ¿se comunicó con Porras?
– No.
– Se siente tranquila y segura con su accionar.
– Sí.
– ¿Incluso para poder demostrarlo en la Justicia?
– Sí.
– Usted me indica que desconoce la participación de Porras…
– Con la médica ayudamos a completar la documentación que le faltaba, entonces Porras tampoco incurre en ningún delito, en ningún incumplimiento. Él solicita lo que tiene que solicitar, se le da lo que se le tiene que dar y hace el traslado.
– ¿Tampoco incurre él en una falta a la hora de que usted le pase información?
– No, tampoco. Estaban todos los papeles cumplimentados para el traslado. Se trasladó a un paciente con resultados negativos, esto está avalado por la Sociedad Argentina de Infectología. Tuvimos la mala suerte de que ese paciente, en esos cuatro días probablemente desde que se hizo el último test hasta que se trasladó, se puede haber infectado.