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Tras el tarifazo impuesto por el gobierno nacional, con la promesa de que sería el último, el jefe de gabinete, Marcos Peña, reconoció que los aumentos en los servicios públicos y gas continuarán hasta el 2019. Lo hizo a través de su informe de gestión ante el Senado.

«Prevemos que hacia fines de 2019 finalicen los aumentos asociados a la reducción de subsidios, con excepción de la región patagónica para el gas natural y para el noreste en términos de energía eléctrica, siempre manteniendo un esquema de tarifa social», apuntó Peña en su informe.

El jefe de Gabinete recordó que el presidente Mauricio Macri estableció como prioridad la «normalización del sistema energético» a través de un «sendero gradual de reducción de subsidios a partir de las actualizaciones de los precios», con tarifas sociales para los más vulnerables, premios para los que ahorran e incentivos para los que invierten.

En ese sentido, el Gobierno proyectó un ahorro de $ 64.262 millones para este año con la reducción parcial de subsidios al consumo de luz y gas. En 2017 fueron $ 75.319 millones y, en 2016, $ 142.154 millones, es decir, casi $ 282.000 millones en tres años.

Además, Peña también adelantó que, a pesar de la reducción de subsidios sociales, el déficit fiscal se extenderá al menos por tres años más: 3,2% de déficit primario en relación al PBI en 2018; 2,2% en 2019; y 1,2% en 2020.

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