Este lunes, las organizaciones sociales de San Juan se unen al «piquetazo nacional» con movilizaciones y la implementación de 500 cortes en todo el país.
La convocatoria en la provincia se lleva a cabo bajo el lema «El hambre no espera», donde se demanda con urgencia el suministro de alimentos para los comedores y merenderos locales. Además, se exige un aumento en los planes Potenciar Trabajo, la continuación de las obras de urbanización en los barrios, y se protesta contra la gestión de la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Desde tempranas horas, los manifestantes se congregaron en las intersecciones de la Avenida Rawson y la calle Mitre. Esta acción está siendo coordinada por la Federación Nacional Territorial (FeNaT), la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), y la CTA Autónoma.
Estas movilizaciones no está exenta de tensiones a nivel nacional. El Ministerio de Seguridad, liderado por Patricia Bullrich, ha anunciado que aplicará el Protocolo Antipiquetes para desalojar a aquellos que corten calles, avenidas o puentes. Esta medida ha generado un clima de incertidumbre y confrontación, especialmente ante la determinación de los manifestantes de llevar adelante sus reclamos.
Desde el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), vinculado con Juan Grabois, se suma un reclamo adicional. Se critica la implementación del ajuste en el Programa Potenciar Trabajo, antes unificado y ahora dividido en dos programas, que afecta directamente a los trabajadores de la economía popular. Según señalan, esta medida estigmatiza a quienes dependen de estos programas complementarios de salario, evidenciando una política que relega a los sectores más vulnerables y profundiza la brecha social.
En medio de un panorama de tensión y demandas insatisfechas, los dirigentes sociales enfatizan la necesidad de mantener la presión en las calles para visibilizar las problemáticas que aquejan a amplios sectores de la sociedad y exigir respuestas concretas por parte del gobierno. La jornada se presenta como un nuevo capítulo en la lucha por la dignidad y los derechos de los trabajadores y sectores excluidos del sistema formal.