Un museo de Caucete fue el blanco elegido por delincuentes para hacer de las suyas. A ese sitio ingresaron sin más obstáculos que unos ventanales con los cristales dañados que quedan semiabiertos durante toda la jornada.
Una vez adentro, el o los ladrones sustrajeron una costosa pieza que estaba allí exhibida, un mate de plata, precisaron de la UFI de Delitos contra la Propiedad.
Ahora, resolver el robo será una tarea bastante difícil, porque los ventanales están dañados desde hace un mes, los empleados del lugar tampoco tienen noción desde cuando faltaría esa pieza y porque el museo no cuenta con cámaras de seguridad.
La Unidad Fiscal de Investigación de Delitos contra la Propiedad arribó a las 13 de este viernes al Museo Regional de Caucete, situado en calles Juan José Bustos, a metros de 25 de Mayo.
Allí, el personal de la UFI se encontró con el director de Cultura municipal y con varios empleados administrativos y de limpieza para charlar sobre el robo de ese mate de plata que estaba en una de las vitrinas.
Allí, el personal judicial se enteró que ni siquiera los empleados que visitan a diario el museo sabían desde cuando faltaría la pieza, pero manifestaron que los cristales de los ventanales están dañados desde hace un mes.
Y que esas aberturas quedan entreabiertas todo el día porque no se pueden cerrar totalmente, según datos judiciales. Al mismo tiempo, los pesquisas se encontraron con otro punto negativo para su investigación: ni el museo, ni los domicilios, ni los comercios aledaños cuentan con cámaras de seguridad.
De todos modos, los investigadores realizaron algunas maniobras, como la recolección de huellas, para ver si de ese modo logran obtener un indicio que los lleve con el o los autores del robo.