La Plaza Departamental Manuel Belgrano se ha transformado en una trampa para los niños por el mal estado en el que se encuentra, resulta muy peligroso llevar a los niños a jugar todo esta roto y en mal estado, los juegos de madera están astillados y con huecos. El tobogán hace más de un año que esta sumamente roto y con fierros saliendo que pueden dañar seriamente a cualquier niño. Hay huecos con perras y crías. La basura es abundante.
La plaza departamental lejos de ser un orgullo es digno de ser comparada con un baldío que solamente tiene iluminación donde abundan perros vagabundos y basura.
