Esta situación ya se había vivido cuando un conocido abogado caucetero intento “apropiarse” de una importante cantidad de tierras de Las Chacras, intentando sacar a las familias del lugar, las cuales llevan generaciones viviendo ahí, las mismas son descendentes de pueblos originarios. Pero esta vez el personaje que intenta amedrentar, no solo con gestos y acción física, sino que a los tiros y colocando carteles.
Nuevamente los pueblos originarios son víctimas de personas que creen que los terrenos de los aborígenes de nuestra tierra, en este caso de los Huarpes, son terrenos en donde se puede ir a ser posesión sin importarles la vida de las familias que viven ahí. De acurdo a los tratados nacionales y a nivel mundial, las tierras donde habitaron los primeros nativos y que su legado prosiguió con las generaciones venideras en el mismo lugar, son patrimonio de las comunidades aborígenes. Esto refiere que no es solo el tiempo que vivieron ahí, sino los siglos y las descendencias que siguen en la misma tierra, los hacen dueños inobjetables de estos lugares.
Mario Brizuela es una persona que desde el año pasado viene amedrentando a las familias de Las Chacras, y las mismas se cansaron y hoy realizaron la denuncia en la comisaria, en dialogo exclusivo con este medio, las familias nos relataron la situación violenta que están viviendo con esta persona. Las familias se juntaron, y vinieron a exponer la situación, nos describen las familias, miembros de la comunidad huarpe, que esta persona argumenta que por herencia de una señora de apellido Andrada, esas tierras son de él, un hecho que aun no ha podido justificar, y las familias no conocen a esa persona que él hace referencia. Según las familias, ni si quiera son descendientes de aborígenes. Pero no solo el hostigamiento verbal es lo que han sufrido las familias sino que ahora dispara al aire con su arma amedrentando a las personas y coloca carteles donde dice “propiedad privada”, un hecho insólito.
Brizuela, nos comenta la comunidad, es un hombre que va a Las Chacras y trata de asustar a las familias diciendo que es el dueño, pero no solo eso, también dispara al aire en postura de caudillo y colocando carteles, argumentando y apropiándose de terrenos que no le corresponden. Una de las mujeres, nos describe una situación que vivió su hermano, el cual se dirigía por la huella hacia la ruta, y Brizuela se le atravesó en el lugar y no lo dejaba pasar, el joven intentaba ir a trabajar, en ese momento de tención, lo amedrento y se le burlaba, expresa una de las mujeres de la comunidad.
Según las familias, también dice ser abogado, pero en otras oportunidades, dice ser policía. Ante esto última situación, hay testigos que nos comentan que solía ir con vestimenta de policía y un arma para generar miedo a las comunidades, ante estas situaciones vividas, las comunidades decidieron realizar la denuncia el día de hoy, también ya se hicieron eco de esta situación organizaciones de pueblos originarios de la provincia y nacionales, también los representantes legales de las comunidades. Esto recién comienza y las comunidades van a ir hasta las últimas instancias para hacer respetar sus tierras, tierras que ya forman, no solo como una herencia aborigen, sino también como patrimonio histórico de los pueblos originarios de Caucete, San Juan y la Argentina.