Los comerciantes se quejan porque dicen que les quitan ventas mientras ellos deben afrontar gastos fijos.
Los fines de semana, contando los viernes por la tarde y los sábados, suelen encontrarse hasta 80 vendedores instalados hasta con mesones en las veredas de la Diagonal, ofreciendo todo tipo de mercadería, desde ropa, zapatillas, cosméticos, bijouterie, relojes, anteojos para sol, sábanas y manteles, entre otros artículos, que también se comercializan en los comercios instalados. Incluso ayer por la mañana había unos 10 en distintos puntos.
Para tratar de encontrar una salida, los integrantes de la Cámara de Comercio de la Ciudad de Caucete, que preside Luis Agulles, le presentaron algunas semanas atrás una nota al intendente Julián Gil pidiendo que la comuna tomara «algún tipo de medidas sobre los puestos de venta que no pertenecen a ningún local comercial», pero hasta ahora no obtuvieron respuesta. Como una salida, Agulles dijo que le propusieron al municipio que destine algún predio para que trabajen, pero que cesen con esta práctica que consideran desleal.
A modo de ejemplo, un local de unos 25 metros cuadrados paga un alquiler mensual de unos 20.000 pesos, a lo que hay que sumar la tasa municipal de comercio de unos 18.000 pesos al año, un empleado cuesta unos 40.000 pesos mensuales y entre monotributo e Ingresos Brutos deben desembolsar otros 10.000 pesos.
Una vendedora, que no se quiso identificar, dijo que es su modo de vida y que están autorizados por el municipio para trabajar en la calle. En ese sentido, Osvaldo Díaz, desde el área de Inspectores de Industria y Comercio de la municipalidad, explicó que hay unos 30 vendedores que pagan un canon de 280 pesos semanales para vender y que si el frentista los autoriza pueden ejercer su actividad. «Si algún comerciante no los quiere en su vereda nos avisa y lo sacamos», dijo Díaz.
Oscar Agüero, desde el Sindicato de Empleados de Comercio de Caucete, sostuvo que están en contra de los vendedores callejeros porque la actividad atenta contra las fuentes de trabajo en los negocios legalmente establecidos.
Monto280Es en pesos el canon semanal que paga un vendedor ambulante a la municipalidad para realizar su tarea en cualquiera de las veredas de la Diagonal Sarmiento.
Protagonistas
LUIS AGULLES
Panadero

«Estamos frente a una competencia desleal y hace falta encontrar una salida. Podría ser que tengan un espacio para que puedan vender e incluso desde la cámara los podríamos capacitar».
LUIS TARABAY
Secretario de la Cámara

«En mi caso, que tengo negocio de ropa, tengo costos fijos que afrontar todos los meses, como alquiler, sueldos del personal e impuestos. Así no podemos competir».
NATHANEL YEKUTIEL
Comerciante

«En mi caso tengo una serie de gastos fijos que afrontar todos los meses mientras que un vendedor ambulante no paga casi nada. Los sábados, por ejemplo, es un caos».
Diario de Cuyo