Jay De La Cueva, cantante mexicano y ex Molotov, pasó por la provincia para rodar un videoclip en el Parque Natural y Paisaje Protegido Loma de las Tapias y el Teatro del Bicentenario.
Jay De La Cueva, cantante mexicano y ex Molotov, pasó por la provincia para rodar un videoclip en el Parque Natural y Paisaje Protegido Loma de las Tapias y el Teatro del Bicentenario.
Por su escenarios naturales, las instalaciones de la novísima joya de la cultura argentina, como es el Teatro del Bicentenario, el talento artístico y la calidez humana, San Juan fue elegida como set para el rodaje del videoclip de un reconocido artista mexicano.
Se trata de Jay De La Cueva, quien pasó por la provincia junto a su equipo para filmar su proyecto en las instalaciones del Teatro del Bicentenario y el Parque Natural y Paisaje Protegido Loma de las Tapias.
En esta oportunidad, más de 30 sanjuaninos participaron de este proyecto de carácter internacional, entre equipo técnico, escenografía, bailarinas y producción.
El trabajo audiovisual del cantante pionero del rock en español, miembro de grupos míticos como Los Hooligans y colaborador de Molotov, Belinda y Ángeles Azules, entre otros, contó con la dirección de Ramiro Iván Díaz, mientras que la producción nacional y local estuvo a cargo de Belisario Saravia y Alta Productora, respectivamente.
“Nos pareció de gran importancia la colaboración de San Juan como polo audiovisual, poniendo a disposición los recursos de la provincia que promoverán el desarrollo cultural y turístico, como así también el crecimiento del ámbito audiovisual de la provincia”, destacaron desde el equipo técnico del artista.
«El pájaro de fuego» es un fashion film inspirado y diseñado exclusivamente para dos canciones aún inéditas del virtuoso artista mexicano Jay De La Cueva, quien se dispone a lanzar su primer álbum como solista.
El concepto de este film gira alrededor de la parábola del resurgir, una parábola de tiempo cíclico. Por eso, se acudió al símbolo mítico del ave de fuego para encarnar la puesta en escena, además de la creación de una narrativa circular que permitiera pasar de un plano más bien realista hacia un nivel más bien onírico.
De este modo, surgió la necesidad de dos espacios bien disímiles para escenificar este pasaje entre planos sensoriales. Por eso, una vez escrito el guión y a la hora de diseñar la producción, San Juan ofrecía múltiples ventajas significativas.
En primer lugar, el Parque Natural y Paisaje Protegido Loma de las Tapias resultó ser un escenario ideal para llevar adelante el rodaje. En San Juan, la tierra muestra sus marcas íntimas de nacimiento y de vida. Así, el cordón comprendido entre Atacama y Malargüe, fue el entorno ideal para este mítico resurgir.
En segundo, las instalaciones del Teatro del Bicentenario fueron una inspiración sin igual para la composición de este film, de las cuales los mexicanos quedaron alucinados por su esplendor arquitectónico, además del equipamiento tecnológico, operadores técnicos y personal administrativo y artístico.
Por otro lado, los miembros del equipo internacional comentaron que “fue clave conocer un talento único de la provincia de San Juan, Victoria Balanza”. Ella se encargó de realizar una propuesta artística, un gran desafío del proyecto.
Se trató del montaje de una coreografía basada en la canción de Jay pero que a su vez homenajeara la clásica pieza de Ballet Ruso «El pájaro de fuego» de Igor Stravinsky. En muy poco tiempo, Victoria seleccionó diez bailarinas clásicas de la provincia y compuso junto a ellas y a su asistente una pieza única, que ya es un patrimonio emblemático de este proyecto.
Por último, los mexicanos destacaron el talento artístico y la calidez humana en el trato y el trabajo por parte de Alta Productora, personal del TB, el staff y el elenco estable del estudio Ballerinas, el diseñador de alta costura Francisco Zito y transmitieron su agradecimiento al personal del Ministerio de Turismo y Cultura.